Las habilidades sociales están conformadas por un
conjunto de aprendizajes que tienen que ver con actitudes y sentimientos que te
permiten relacionarte con otras personas
de manera adecuada.
Las habilidades sociales que necesitamos para interactuar
son muchas, pero ahora trataremos solo de dos: el sonreír y el saludar.
¿Has escuchado en algún momento la frase: “Sonríe que el
mundo sonreirá contigo”? Bien, la sonrisa y la risa son expresiones no verbales
que muchas veces están presentes en las interacciones con otras personas. Estas
expresiones sin palabras pueden significar aceptación, aprobación, agrado y
gusto.
Para los estudiantes también es muy importante sonreír y
que sonrías con ellos. Cuando sonríen ante situaciones agradables y cuando tú
les sonríes, les indicas tu aprobación y estimulas su autoestima, es decir, su
propia valoración. Además, solicitar algo mediante una sonrisa, hay más
posibilidad que tu petición sea aceptada.
Al igual que el sonreír y el reír, la habilidad de
saludar también es una habilidad social muy importante. Esta puede ser
expresada con un mensaje verbal y no verbal. Por ejemplo, al decir ¡hola!,
¡buenos días!, o al asentar la cabeza, se indica que estamos percibiendo la
presencia de la otra persona.
En los estudiantes, el desarrollo de esta habilidad les
permite realizar marketing personal y vender su imagen ante los demás como una
persona bien educada y, por ende, respetada. Al saludar debes tener presente:
• Acompañar las frases con gestos: dar la mano, asentir
con la cabeza, una sonrisa, dar una palmada en el hombro.
• Expresar los sentimientos que producen el saludar a
esta persona, por ejemplo: “me da mucho gusto el encontrarnos”.
• Expresar frases que inicien, mantengan o finalicen la
interacción. “Vamos a sentarnos para seguir conversando”, “me gustó verte, pero
ahora me tengo que ir, es una lástima”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario